Como dice de nuevo Nicolás Gómez Dávila "El hombre no crea a sus dioses a su imagen y semejanza, sino se concibe a la imagen y semejanza de los dioses en que cree"
http://www.guardian.co.uk/world/2011/jan/01/egypt-bomb-kills-new-year-churchgoers
Pensé en comenzar la primera entrada del año con una referencia antibioética a la compra de niños por personas unidas o no en pareja pero con suficiente dinero como para encargarlo en Estados Unidos y "procesar" en el sentido industrial en un país del Tercer Mundo. Pero creo que el tema debe esperar ante el hecho que nos ha sorprendido esta mañana, otra matanza de cristianos que se encuentran desde siempre (al menos desde el inicio del cristianismo) en un país donde se extendió el Islam y donde la realidad actual es el exterminio.
No seré yo quien caiga en la banalidad de pedir la reciprocidad en el trato, algo imposible en la relación entre un estado con libertad y uno islámico (sin radical ni nada), sencillamente llamo la atención sobre lo que ocurre con la minoría cristiana en lugares donde la mayoría es musulmana. Es cierto que la nueva oleada de exterminio viene de mano de grupos extragubernamentales, incluso en los casos de Bagdad y Alejandría, claramente antigubernamentales pero tengo la impresión que no se hace lo necesario para proteger a los coptos, caldeos o maronitas. Es más hace unos días la policia egipcia mostró su brutalidad contra los coptos que pretendían construir una Iglesia, pues ya se sabe que en la nueva reislamización lo fundamental es poner dificultades a los cristianos. Por ello aunque sean mejor que nada creo que hay que desconfiar de los encuentros de líderes religiosos que no se traducen en hechos ni en llamadas a los gobiernos sobre los que se tiene influencia para que mejoren el trato a los integrantes de otras religiones.
Especialmente hay que referirse a los gobiernos que son tan beligerantes en algunos aspectos de la imposición de los programas radicales (como el nuestro) y que excluyen sistemáticamente de su agenda en el trato con otros países, singularmente los islámicos, toda referencia a la situación de la minoría cristiana. Casi parece que algunas formas de laicismo no son estrictamente antireligiosas sino fundamentalmente anticristianas.