Andaba nervioso por la imposibilidad de alcanzar un acuerdo estable en Ucrania, el riesgo cierto de un enfrentamiento bélico entre potencias en Siria, la falta de consenso en como evitar la financiacion del DAESH o las dificultades de la OEA en conseguir que el gobierno venezolano respete los mínimos derechos políticos.
En otro orden de cosas me desmoralizaba la constante caída de la practica religiosa entre los católicos, el avance de la lacra del aborto provocado o la expansión de la eutanasia.
Sin embargo me he tranquilizado. Todo el mundo se ha puesto de acuerdo en evitar que la temperatura del planeta suba dos grados.
Una duda me asalta, dado que las instituciones no consiguen cumplir los objetivos para las que se fundaron ¿no estarán escapando por elevacion?
Buena pregunta final, Señor Serrano, lo que pasa es que ya no se sabe nada de nada.
ResponderEliminarTodo parece quedar como cuando probamos varios perfumes y con lo costosos que son, al final, decimos...¡anda pero si huelen todos igual!, entonces...¿ qué sentido tiene tantos diferentes perfumes?, si se queda todo en nada o en lo mismo.
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