martes, 28 de junio de 2011

Sobre ley Pajín de final de la vida en La Razón



Profesor de Filosofía del Derecho de la UCM

Otra crítica acertada; por José Miguel Serrano

Tras el rechazo de la Secpal y la OMC, de otras organizaciones  y de importantes asociaciones bioéticas, la ley Pajín de final de la vida ha recibido una nueva y acertada crítica de la Conferencia Episcopal Española.


27 Junio 11 - - José Miguel Serrano
 Esta Institución, más que adoptar un punto de vista estrictamente confesional ha buscado, como habían hecho también los portavoces de otras confesiones como los evangélicos, una defensa global de la dignidad humana. Es especialmente acertado que el documento crítico recuerde que las normas jurídicas deben proteger la vida humana  y su dignidad; en caso de que esa protección no sea suficiente, nos encontramos ante una norma antijurídica. El documento acierta, en línea con el punto de vista de los profesionales de cuidados paliativos, cuando señala que no basta con que una norma diga que una conducta no es eutanásica para que deje de serlo. En efecto,  puede producirse la muerte por omisión de cuidados o por sedación contraindicada o excesiva. Si estas conductas se dirigen a producir la muerte son eutanásicas. El proyecto parece confundir cuáles son los peligros  a los que se enfrenta la vida humana en sus últimas fases. Con los antecedentes de la opinión gubernamental sobre la dignidad de la vida esta confusión puede parecer intencionada.

lunes, 27 de junio de 2011

Fuga de Afganistán. Artículo en el Confidencial digital

Como casi todas las fuerzas conquistadoras, la excepción son los macedonios que algo aguantaron, los “aliados” preparan la huida de Afganistán. Realmente decir los aliados es mucho decir pues Obama no ha preguntado a nadie para salir del territorio afgano con el ridículo tópico de devolver al pueblo afgano su seguridad. Este cinismo se parece bastante al de la llamada vietnamización en la que al final se devolvió la “seguridad” a los vietnamitas del sur que fueron convenientemente arrollados por los del Norte.
Se pueden cruzar apuestas sobre lo que tardarán las facciones talibanes, juntas o en conflicto entre ellas,  en enseñorearse del territorio afgano y de Kabul.
Como decía un amigo saudí Afganistán volverá a lo de siempre, al cultivo de opio y a matarse con entusiasmo entre sí.
Obama vende que la muerte de Osama en Pakistán, en un atentado concreto de fuerzas especiales culmina las operaciones que se iniciaron en 2001. Si esto fuera así no se entiende la presencia de aliados que hemos dejado mucha sangre para controlar territorios que hoy ya se dan por incontrolables. La carrera hacia la salida que hemos iniciado tarde, pues nadie se molestó en informar a Chacón del nuevo panorama, nos deja a todos vencidos y en derrota como dice el himno genial de Les Luthiers.
Con los acontecimientos de Afganistán el ridículo del Gobierno español alcanza su cenit. Rodríguez presumía de haber abandonado el apoyo entusiasta de Aznar, pero a este al menos le avisaban de las cosas y hacían el paripé de llevarle a las reuniones. A nosotros nadie nos dice nada aunque hemos alcanzado el record de tropas desplegadas. Chacón debería estar más atenta en Libia donde es posible que nos hagan la pirula. Aún sin eso el estancamiento libio se resolverá, como el afgano, con otra salida en falso.
Pd: Redactado el artículo tenemos noticia de cinco nuevas bajas,de ellos dos muertos,  en acción en la guerra afgana. Es de temer que tras los anuncios de los últimos días la presión talibán crezca exponencialmente una vez que han constatado la cercanía de una posible victoria. Cuando no se esta para ganar lo mejor es retirarse con el número menor de bajas posible. Todo ello no quita el menor mérito al comportamiento y sacrificio de nuestras fuerzas.
José Miguel Serrano es profesor titular de Filosofía del Derecho de la Universidad Complutense de Madrid

sábado, 25 de junio de 2011

Acompañando hasta la muerte Articulo de Ignacio Sols en la Razón

En la razón de hoy artículo algebraico de Ignacio Sols.
«El país se ha movido desde la eutanasia para los enfermos en situación terminal a la eutanasia para los enfermos crónicos; desde la eutanasia para enfermedades físicas a la eutanasia para las enfermedades psicológicas, y desde la eutanasia voluntaria a la eutanasia no voluntaria y a la involuntaria». Así resume Herbert Hendin, presidente de la sociedad americana de psiquiatría del suicidio, en su informe Seducidos por la Muerte (Planeta, 2009), la «pendiente resbaladiza» por la que Holanda se ha deslizado en veinte años desde su tímido inicio con una eutanasia sólo para enfermos en fase terminal hasta una situación descontrolada: «Los doctores que ayudaron a traer a Holanda la política de la eutanasia son conscientes de que la eutanasia está básicamente fuera de control».

Según Hendin, por esta misma pendiente se ha de deslizar inexorablemente, mediante sucesivas ampliaciones legislativas, cualquier otro país que comience autorizando la eutanasia «sólo para enfermos en situación terminal». Éste es el actual punto de llegada holandés, que no deberíamos imitar: «En Holanda, la eutanasia no voluntaria es más común que la voluntaria». Esto es muy grave. Hendin había viajado a Europa para estudiar el modelo de eutanasia holandés, a fin de implantarlo en su propio país, pero pronto observó la peligrosa deriva de este modelo. De hecho, la mayoría de países europeos –todos, salvo Benelux y Suiza– han echado marcha atrás en los primeros intentos de imitación del recorrido holandés, para evitar caer por esa misma «pendiente resbaladiza».

Sin que nos demos cuenta, en España podemos encontrarnos muy pronto en el principio de esta «pendiente resbaladiza» de la eutanasia, cuyo suave inicio es el proyecto de ley que el Consejo de Ministros del 13 de mayo decidió presentar a las Cortes. Una vez hecha la ley, vendrá el uso de ella, lógico, pero enseguida llegará el abuso, tal como ocurrió con el aborto; y en lugar de penalizar el abuso, se acabará legalizando. En este caso, las víctimas no serán los no nacidos, sino los ancianos de las próximas décadas.

Es cierto que el texto del proyecto de ley habla de la limitación por la buena práctica médica (lex artis) de la actuación terapéutica del médico sobre el paciente cuando se trata de prohibir que su celo curativo vaya más allá de lo razonable, o de lo deseado por el propio enfermo, lo cual está muy bien, aunque esto ya lo tenemos desde hace tiempo. El problema reside en el hecho de que, al establecer la obligación del médico de procurar al paciente el tipo de sedación que éste haya pedido, sea cual sea su situación clínica y la respuesta a otros tratamientos, no se hace ya mención de limitación por la lex artis médica, ni tampoco se hace mención de la clásica distinción entre «sedación indicada» y «sedación  no indicada». La sedación no indicada es aquella realizada en una situación clínica que no la requiere, con el fin de producir el fallecimiento del paciente. Pues bien, esta sedación será obligatoria para el médico si el enfermo la pide (o si el médico logra que el enfermo la pida), por muy mala práctica médica que sea. Esto no acaba aquí. El derecho del paciente a morir suele llevar al derecho del médico a matar. Este proyecto de ley dará cobertura legal a quienes se refugien en la excusa de que fue el enfermo quien lo pidió: el enfermo, ese ser a menudo tan desvalido, tan dependiente, y tan fácilmente manejable.

lunes, 13 de junio de 2011

Artículo en el confidencial digital sobre los supuestos indignados.

Por sus obras


















Supongo que después de tantas elucubraciones convendría analizar los hechos de los autodenominados indignados. Por sus acciones y la similitud de estas con acontecimientos del inmediato pasado podríamos definir al movimiento con mucha más claridad que con los discursos interpretativos surgidos en la prensa . El nivel del “descubrimiento” de los nuevos analistas puede compararse al de los periodistas de “New York Times” que sostenían que Fidel Castro no era comunista, o a quienes pensaron que el grueso del movimiento “nunca mais” surgía de un sincero ecologismo o quienes interpretaban que el “no a la guerra” era sinceramente pacifista y no se traducía en un no a la única guerra del PP y si a las tres guerras simultáneas del PSOE.
En este contexto podríamos preguntarnos como los indignados no muestran ninguna indignación real contra el Gobierno en el poder a lo largo de toda la crisis y sin embargo concentraron sus acciones justo cuando venía un claro cambio de gobiernos en las elecciones municipales y autonómicas. En ese momento se descubrió la oposición a toda la clase política. ¿A toda? Podemos preguntarnos. Tras la acción en la jornada de reflexión que usurpaba en cierta medida el posible resultado, el siguiente paso ha sido el “boicot” a los nuevos ayuntamientos y gobiernos regionales. Evidentemente el boicot se ha traducido en una acción contra la legitimidad democrática de un gran número de ayuntamientos de centro derecha. Hasta tal punto la acción esta enmarcada en la clásica manipulación ultraiquierdista que en los lugares donde la ultraizquierda hermana de quienes manejan a los indignados ha ocupado el poder, es decir, en los ayuntamientos de “Bildu”, allí no ha habido concentraciones de “indignados” sino de los violentos “encantados” de siempre.
Para completar el cuadro casposo, o si se prefiere pulgoso, se han intentado acciones contra actos episcopales en Salamanca y Madrid, pues ya sabemos que sindicatos y políticos de izquierda no tienen nada que ver con lo que acontece y toda la culpa es del clero que, como en el XIX, reparte caramelos envenenados.
De nuevo la izquierda juega a la deslegitimación de las urnas cuando pierde y prepara la gran deslegitimación cuando la mayoría de la población que esta justamente indignada en sus casas y en las urnas apoye un gobierno alternativo. Lo que vemos es tan repetido, tan banal, tan visto que casi da vergüenza describirlo pero como el número de los necios es incontable bueno es denunciar el nuevo fraude para que no nos tomen a todos por tontos.

José Miguel Serrano es profesor titular de Filosofía del Derecho de la Universidad Complutense de Madrid.

sábado, 11 de junio de 2011

Artículo en la razón sobre la apología del suicidio asistido en la bbc

La emisión en la BBC de un reportaje del activista proeutanásico Terry Pratchett ha creado el consiguiente y buscado escándalo. Como han dicho comentaristas británicos, es intolerable que la televisión pública ejerza de animador de quienes tras los fracasos de 2006 quieren legalizar la eutanasia en Gran Bretaña con la máscara del suicidio asistido. En este caso, se ha insistido en que la retransmisión no ya de suicidios sino de notas sobre los mismos está desaconsejada por la BBC y prohibida por los medios británicos.
Conviene detenerse en la parcialidad de los argumentos esgrimidos por los partidarios de las peculiares muertes dignas. Promocionar el suicidio asistido como una práctica autónoma de millonarios aquejados por graves dolencias supone ignorar lo que diversos autores han manifestado; personajes como Cicely Saunders, fundadora de los cuidados paliativos,  o el juez Lawton, autor del primer informe británico desestimando la posibilidad de legalización de la eutanasia. La presión social una vez legalizadas estas prácticas va a ser enorme. Y ésta no se ejercerá sobre sujetos de grandes recursos, sino sobre ancianos enfermos con pocos medios. Una vez planteada la posibilidad, esas personas tendrán que justificar su opción por vivir, y eso en el caso de que no sean la ristra de parientes los que decidan por ellas.



José Miguel Serrano

jueves, 9 de junio de 2011

Alegaciones de la Asociación Española de Bioética a la Ley Pajín del final de la vida.

ALEGACIONES DE AEBI A
LA LEY REGULADORA DE LOS DERECHOS DE LA PERSONA ANTE EL PROCESO FINAL DE LA VIDA
1º.- Exposición de motivos, párrafo 12,
a) Donde dice: el tratamiento del dolor, previendo específicamente el derecho a la sedación paliativa, aun cuando ello pudiera implicar un acortamiento de la vida,
Debería cambiarse por: de acuerdo con el estado de la terapéutica paliativa y la Lex Artis.
Motivación:
una indicación terapéutica, como la sedación, no puede ser un derecho. La sedación es una maniobra terapéutica dirigida a aliviar el sufrimiento del paciente, no acorta la vida, la muerte no puede considerarse como el efecto indeseado, ya que el enfermo fallecerá inexorablemente a consecuencia de la enfermedad y/o sus complicaciones. La Medicina es una profesión autoregulada constitucionalmente a través de los Colegios profesionales. Entra dentro de los deberes profesionales la actualización de conocimientos para el manejo de la terapéutica paliativa y por tanto de la Lex Artis.
b)Donde dice: sometiendo estos últimos derechos a las disponibilidades de los centros y a la compatibilidad con las medidas necesarias para una atención médica de calidad.
Debería suprimirse
2
Motivación: si se otorga el derecho a la habitación, por definición este derecho no puede ser limitado, entraría en contradicción.

miércoles, 8 de junio de 2011

A propósito de la BBC y la eutanasia.

Sin tiempo para mas redacción, y ante el escándalo de la promoción pública del suicidio asistido en Gran Bretaña, contesto con lo mejor que tienen los británicos.

lunes, 6 de junio de 2011

Muer Kevorkian con un record de 130 homicidios.

Sin dejarse ayudar el mismo ha fallecido el gran facilitador de eutanasias.http://www.mercatornet.com/careful/view/9214/

Artículo 19 de la nueva Ley de final de la vida.

Reproduzco el artículo en el confidencial digital sobre la nueva ley Pajín. La pista de es Jose María Coello de Portugal, siempre atento a los derechos.

Lunes, 06 de junio de 2011
José Miguel Serrano
Retroceso en la asistencia espiritual


















       
La revuelta sanitaria contra la exclusión de la lex artis en los parámetros de actuación obligatoria en la fase final de la vida es un hecho. Esta es la base de las 36 alegaciones que ha presentado la Sociedad Española de Cuidados Paliativos apoyada por la Organización Médica Colegial al “anteproyecto.Pajín de actuación al final de la vida”. Podría uno preguntarse qué tipo de consenso y asesoramiento técnico ha tenido un Ministerio de Sanidad que se encuentra con una crítica muy dura a una norma que parece dirigirse a implantar la sedación contraindicada muchas veces, por cierto , a petición de terceros.
Pero al margen de las críticas que hemos visto sorprende que la norma, que tiene aspiraciones pluralistas y hace alguna mención a la atención espiritual a petición del paciente, “olvide” en el artículo 19 incluir la obligación de las Administraciones sanitarias de facilitar el acceso a esa asistencia al paciente que lo demanda.
Se dirá que hay convenios con las confesiones religiosas , pero puesto que estamos sometidos a la famosa ofensiva laicista conviene incluir la mención. La presencia de capellanes en los hospitales es ciertamente un escándalo para quienes intentan excluir la religión no tanto de la actividad pública sino de todo espacio público. Pero sin ellos el discurso de la asistencia espiritual para quienes lo demanden es puramente vacio y el derecho no se cumple. En una norma que constantemente reitera derechos ya garantizados, aunque a veces elimine garantías como el comportamiento médico respecto a la lex artis, no puede considerarse inocente esta exclusión del deber de las Administraciones. Podríamos pensar que hay excesiva delicadeza hacia los activistas sedadores y muy poca hacia la forma en que la mayoría de la población afronta la muerte.

viernes, 3 de junio de 2011

Enlace a las 36 alegaciones de la SECPAL

Aquí estan las 36 alegaciones que ha presentado la Sociedad Española de Cuidados Paliativos con el apoyo pleno de la Organización médica colegial a la Ley de derechos de la persona ante el proceso  final de la vida. De momento la ha apoyado la Asociación de Bioética de la Comunidad Madrid y Derecho a Vivir ha solicitado al Partido Popular que las incorpore como enmiendas. Veremos que hace CIU y el grupo mayoritario socialista. Por cierto esto descoloca totalmente a UPN y su apoyo a la Ley.
http://www.profesionalesetica.org/wp-content/uploads/2011/06/alegacionesOMC-y-SECPAL-31052011.pdf

jueves, 2 de junio de 2011

Severa Crítica de la SECPAL al Anteproyecto de Ley de Derechos de la Persona ante el proceso final de la Vida

RESUMEN SECPAL DEL POSICIONAMIENTO ANTE EL ANTEPROYECTO DE LEY DE DERECHOS DE
LA PERSONA ANTE EL PROCESO FINAL DE LA VIDA
En relación con el citado anteproyecto de Ley, una vez efectuadas las correspondientes
alegaciones, SECPAL resume los siguientes aspectos esenciales:
1) Es inadmisible para las profesiones sanitarias que esta Ley derogue el punto
artículo 11º de la Ley 41/2002
que ninguna instrucción previa contraria al ordenamiento jurídico o a la
ser aplicada. Todo profesional debe actuar bajo criterios de buena praxis, lo cual
incluye diagnósticos y procedimientos adecuados, además de criterios deontológicos.
La Lex Artis no supone ningún riesgo para el paciente, dado que no está sujeta a
valores o conciencias individuales. Al contrario, su aplicación es la mejor de las
garantías.
2) El derecho fundamental para los pacientes al final de la vida es el
los cuidados paliativos de calidad, sin discriminación de ningún tipo
debe constar en artículo independiente y no está relacionado con la presencia o no de
determinados síntomas o la necesidad de ciertas
derecho de acceso universal para todos los ciudadanos.
3) El modelo de prestación de cuidados paliativos
independiente, a continua
lo previsto por la Organización Mundial de la Salud, los Consejos de Colegios
Profesionales, la Estrategia en Cuidados Paliativos del Sistema Nacional de Salud, el
Parlamento Europeo
de intervención, el básico (o general) y el especializado en cuidados paliativos
interviene en los casos más complejos. Debe constar igualmente el
los cuidados, que incluye el
la intervención psicosocial, y al auxilio espiritual
4) Para garantizar el derecho a recibir cuidados paliativos en el nivel básico, hay que
garantizar la formación pre
enfermería, psicología y trabajo social)
garantizarse igualmente la acreditación avanzada en
establecimiento de áreas de capacitación específicas
e (conocida como Ley de Autonomía del Paciente),
ósticos cho acceso equitativo a
omas intervenciones sanitarias. Es un
debe constar en un artículo
, continuación del derecho a recibir dichos cuidados.
o las Sociedades Científicas, dicho modelo se basa en dos niveles
carácter
, derecho a la evaluación y tratamiento de los síntomas, a
espiritual.
ación pre-grado en todas las profesiones relacionadas
social), y para garantizar el nivel especializado, debe
rse todas las profesiones mediante el
específicas.

Prisas en Sanidad. Artículo en la Razón.

Un Gobierno, casi en funciones, presenta para su información ante el Consejo interterritorial del Sistema Nacional de Salud el anteproyecto de ley de atención al final de la vida

2 Junio 11 - - José Miguel Serrano
Con prácticamente todo el Consejo pendiente de renovación y efectivamente en funciones, sorprenden las prisas.  Bien que se ha cuidado Leire Pajín de posponer la reunión  y ahora pisa el acelerador para cuestiones que evidentemente no son de trámite. La sorpresa sobre el peculiar informe aumenta  cuando  sabemos que la norma de efectivo incremento presupuestario, es decir,  el repetido «derecho a la habitación individual para morir» está pospuesto cinco años, lo que en las actuales circunstancias es un retraso «ad calendas graecas». Tan notable desprecio al resultado de las elecciones del 22-M debe de tener alguna razón diversa a la súbita prisa por reconocer derechos.
A última hora el Gobierno parece impacientarse e incide en su perfil programático de ideología. En la Historia reciente nadie ha manipulado tanto el Derecho para que, abandonando su función de resolver conflictos reales –por ejemplo en la adecuación de tratamientos al final de la vida y el complicado juego de lex artis, obligación deontológica, deseo expresado por el paciente, por sus allegados etc.–, se disfrace de expresión de una ideología, de una actitud,  e incluso, si se me permite la banalidad ahora abandonada, de un talante. De esa actitud y ese propósito solo puede salir una norma que combine el habitual énfasis en el discurso que hemos sufrido en las dos legislaturas con la ineficacia más notoria para acercarse a la realidad a la que sirve la regulación jurídica. De ahí nuestra desconfianza ante la norma.